Con el time-stretching, mantén precauciones similares a las de los algoritmos de corrección tonal –si exageras el efecto, sonará demasiado obvio, pero nada te impide usarlo en tu provecho, y no tendrás que pelearte con un sampler hardware para disfrutar de tal locura…
La mayoría de algoritmos plug-in para manipulación temporal producen resultados de calidad. De modo que, ¿Preparado para un par de travesuras sobre esa aburrida línea que acaba de cantar tu vocalista?
Para empezar, una degradación deliberada será el producto de un remuestreo del resultado de etapas previas. En otras palabras: evita un resultado predecible y soso metiendo en el plug-in lo que éste acaba de escupir (pero no esperes alcanzar la perfección rítmica).
Si manejas Ableton Live, gozarás de opciones extra gracias a la tecnología ‘Warp’. Live ataca el tempo sin ni siquiera rozar la afinación de tus voces. En ese sentido, los ajustes ‘Texture’ controlan la precisión y el modo en que fluye el algoritmo. En nuestro ejemplo retocamos los parámetros ‘Grain Size’ y ‘Flux’: El primer índice determina el grosor de cada «rebanada» al analizar el audio, y el segundo es útil para añadir aleatoriedad.
Ya ves, el time-stretching es más complejo e interesante de lo que pensabas… ¡Pues venga, a usarlo!
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