Los secretos del mástering

El proceso de mástering
¿En qué consiste este proceso? En primer lugar, el ingeniero de mástering escucha el tema y evalúa sus características y requisitos, incluyendo ecualización general y anchura/ balance de dinámica y estéreo. En este punto quizá el ingeniero de mástering considere que ese tema no necesita ningún retoque –aunque ése no suele ser el caso. No hay reglas que digan qué equipo usar, qué procesamiento aplicar, o qué ajustes llevar a cabo a la hora del mástering. Si alguien te da rápidas generalizaciones sobre procesamiento y ajustes, ¡no le creas del todo!

Una vez el ingeniero tiene una buena idea de lo necesario, procesará el sonido para lograr los resultados deseados. Si echas un vistazo a las unidades externas típicas de los estudios de mástering, tendrás una buena idea del tipo de ajustes posibles. Las herramientas de mástering son muy parecidas a las encontradas en los estudios de grabación y que son usadas para tracking, producción y mezcla. Los equipos más usuales –como ecualizadores, compresores, expansores, y limitadores– ya te serán bien conocidos, aunque las versiones usadas son los equivalentes para el proceso de masterización, y están diseñadas para ofrecer las prestaciones demandadas por los ingenieros de mástering con la más alta calidad sonora posible –existen versiones digitales y analógicas para cada herramienta usada.

Estos procesos exigen una ecualización correcta y precisa y ofrecen distintos ajustes. Muchos equipos presentan opciones específicas para mástering como respuesta lineal de fase, canales estéreo enlazados y ajustes discretos en vez de controles rotatorios variables. Los clásicos modelos Pultec EQ y Manley Massive Passive son los estándares de la industria. Los compresores y expansores controlan el rango dinámico, pero también se usan para añadir una coloración sutil a las pistas. Piensa en modelos como Manley Vari-Mu, Chandler LTD-2, Pendulum OCL-2, y el clásico Fairchild 670. Todos ellos te dan diferentes sabores sonoros, incluyendo funcionamiento a válvulas o de estado sólido, además de VCA, FET, y circuitos ópticos. Si buscas las formas más agresivas de una limitación al estilo “maximizador de volumen”, el mejor modelo es el limitador hardware digital Waves L2.

Juntas, estas herramientas se encargan de las partes más importantes de la mayoría de las tareas de mástering. Otros elementos incluyen reparar problemas con secciones de la mezcla –por ejemplo al aplicar reducción de ruido o ampliar la imagen estéreo. En algunos casos, los ingenieros de mástering emplean compresión multibanda para controlar de forma individual la dinámica de diferentes bandas de frecuencia. Hay compañías que fabrican procesadores digitales “todo-en-uno” para mástering, que ofrecen todas las herramientas de mástering en una única unidad.

Hoy tenemos equivalentes software de casi cualquier herramienta de mástering gracias a productos como la suite iZotope Ozone, IK Multimedia T-RackS, TC Electronics MD3, y la suite Brainworx de utilidades M/ S. Muchos argumentan que la calidad sonora en algunos casos no se corresponde a la de sus homólogos hardware, pero el menor precio y facilidad de uso del enfoque software lo han hecho despegar en los últimos años. Por desgracia, el software posee el indeseado efecto secundario de potenciar el uso de presets, lo cual es una aberración para cualquier ingeniero de mástering que se precie. En la siguiente entrada, trataremos con detalle el mástering mediante software, pero por ahora te diremos que no vamos a usar presets y que los ajustes apropiados se determinan dependiendo de cada caso concreto.