No hay nada como dominar un equipo musical, y sentir que responde a tus ideas creativas como si fuera una extensión de tu propio cuerpo. Pero debe ser un auténtico éxtasis personalizar su aspecto para que dicho interface hombre-máquina sea aún más íntimo.
En nuestro muro de Facebook, apareció milagrosamente una muestra del atractivo trabajo de Pablo Task Mazzon, un lector de Future Music en Argentina que personaliza sus máquinas invirtiendo grandes dosis de gusto, operación cuidadosa y paciencia. Y los resultados están a la vista en las fotos exclusivas que nos ha enviado para compartirlas contigo. Teníamos que conocer todos los detalles sobre su proceso, y sabemos que tú también compartes con nosotros dicha curiosidad…
Hola Pablo. Es un placer saludarte, unidos por la pasión que despierta entre todos nosotros la tecnología musical. Pero tú has ido un paso más allá y has decidido hacer tus equipos aún más tuyos, si cabe. ¿Por qué lo haces?
«Hola a todos, estoy realmente agradecido y feliz por haber llamado vuestra atención con la humildad de mi creación. Lo hago con el fin de que mis pertenencias sean únicas, por romper las barreras de lo que establece el diseño de fábrica, y no sólo con esto, sino con la mayoría del material que poseo. Quizá tengan algo que ver mis obras de graffiti, y mi pasión por el arte tanto como por la música. Todo ello me sirve como inspiración en muchos aspectos de mi vida y van de la mano».
Los resultados de ‘modding’ que consigues son espectaculares. ¿Cuál es el proceso que sigues desde que piensas en el diseño hasta que lo plasmas en el equipo y empiezas a tocarlo?
«Se trata de un proceso que mezcla incertidumbre y paciencia, aunque siempre deposito mi fe en que acabaré con un resultado que me satisfará y me motivará para crear más música. Utilizo programas de diseño gráfico –como Adobe Illustrator– para crear un diagrama o una plantilla con las medidas reales del equipo, incluidos todos sus detalles».
«En el caso de mi KORG Electribe SX, medí e incluí los huecos de los botones, los círculos de los knobs, hasta el óvalo del hueco con las válvulas y otros controles. Después agrego al diseño la estética que me interese… Me gustan mucho los toques retro, y uso colores que contrasten, además de tipografías afines».
Lo que nos cuentas es apasionante. ¿Crees que cualquiera de nuestros lectores podría personalizar sus máquinas siguiendo una técnica similar? ¿Cuánto tiempo inviertes en tus diseños, y a qué coste?
«Sí, por supuesto que podrían. Una vez que acabas de diseñar la plantilla base, puedes crear lo que te parezca, y es algo que resulta fácil y muy adictivo. Después contrato los servicios de una empresa gráfica, donde me imprimen el diseño acabado sobre vinilo autoadhesivo».
«En cuanto al tiempo, creo que en el rediseño de mi KORG Electribe SX me llevó un par de días, aunque dando prioridad a los asuntos de mi agenda. Mi técnica de personalización no es nada complicada, y el coste es muy bajo; quizá lo más caro sea el cambio de los capuchones de los knobs por otros».
¿Qué tipo de problemas te encontraste durante la realización? ¿Y qué fue lo que más te complicó el trabajo?
«Los cortes de las reservas sobre el vinilo han de ser muy precisos para lograr un buen resultado –empleo un cutter o un bisturí para ello, y requiere paciencia. El pegado de la plantilla de vinilo sobre el frontal metálico de mi Electribe fue el proceso más difícil: necesité cuatro manos, así que mi novia me ayudó a que todo acabase posicionado en su debido lugar. Dado que el diseño posee muchas áreas caladas, teníamos dudas sobre los ajustes. El aire que se quedaba atrapado entre el vinilo y el frontal del equipo, también complicó la operación, pero lo solucionamos aplicando calor».
Entendemos que hay un paralelismo en el gusto por personalizar dispositivos con lo que alguien pretende cuando decide hacerse un tatuaje o una operación de cirugía estética. Y al margen de las consideraciones sobre conservar el aspecto original del equipo o su valor como pieza comercial, ¿crees tú que el carácter único que consigues aumenta de alguna forma el valor de tus equipos?
«Bueno, eso es algo que, de momento, desconozco. Se trata de un rediseño muy personal, y más allá de que le imprima mi propio toque, no sé si después de todo lo hace más valioso que el original. La piel o skin adhesivo puedo quitarlo cuando quiera, e incluso modificarlo si me aburre. Por eso conservo todos los componentes originales, los embellecedores de los knobs, deslizadores y demás».
Esta pasión por la ‘customización’, ¿está también presente de alguna forma en tus temas musicales?
«Sí, en gran parte. Me gusta emplear sonidos o partes de temas musicales ya existentes para concebir materiales nuevos… Bueno, digamos que hago bastante sampling».
Nos imaginamos algún tipo de sistema avanzado para que los equipos ofreciesen a todos los usuarios esta libertad de personalización. De hecho, los fabricantes ya están haciendo realidad la idea, ofreciendo kits de carátulas como es el caso de Native Instruments con Maschine. ¿Cómo ves tú el futuro en este sentido?
«Pues me parece algo genial… que los fabricantes se esfuercen por ofrecer esa posibilidad de modificar y personalizar los equipos –así tendría que ser con todo. Mi filosofía es que lo de uno pertenece a cada uno y por eso ha de ser único».
Al parecer, tu sistema de ‘carátulas’ es similar al que utilizan algunos fabricantes –por ejemplo, Dave Smith Instruments emplea paneles adhesivos serigrafiados en la gama Evolver y Mopho. ¿Tienes planes para ir más allá de la personalización, es decir, bucear incluso en la electrónica para modificar la circuitería de tus equipos?
«Eso sería un sueño, la posibilidad de modificar el corazón de un equipo es muy atractiva e interesante. Es un buen plan y lo tengo en cuenta –de momento, pretendo cambiar los LEDs de mi Electribe por otros de color azul».
Desconocemos si, alguna vez, has ofrecido tus servicios de forma comercial. ¿Estarías dispuesto a realizar personalizaciones por encargo para otros? Y en tal caso, ¿cómo podrían contactar contigo?
«Todo esto comenzó como algo muy personal, y nunca sospeché que podría gustarle a otros. En tal caso… sí, estaría dispuesto a crear rediseños por encargo, y mi contacto para ello es pablotask@gmail.com, o en mi Facebook, Pablo Task Mazzon. Los interesados deberían decirme los dispositivos que tengan y que deseen personalizar, además de indicarme el estilo que les gusta y los colores de estética para que yo pueda crear sobre sus propios gustos».
Y ya para acabar, ¿puedes adelantarnos algo sobre tus próximos proyectos de ‘personalización’?
«Mi nueva víctima será mi teclado controlador MIDI de cinco octavas, y después mi KORG NanoPAD. Os agradezco todo vuestro reconocimiento por mi esfuerzo y dedic
ación».
Más información sobre Pablo Task Mazzon: Página personal en Facebook
